sábado, 9 de junio de 2012

CAPÍTULO 7.



Proverbios varios: serie negativa

7 1No hagas mal, y no te sucederá mal;
2aléjate de la culpa, y se apartará de ti;
3no siembres en los surcos de la iniquidad,
y no cosecharás el séptuplo.
4No pidas a Dios poder ni al rey un puesto de honor;
5no alardees de justicia frente a Dios ni de prudencia ante el rey;
6no pretendas mandar si te falta energía para reprimir la arrogancia;
pues te acobardarás ante el noble
vendiendo por soborno tu integridad.
7No te muestres injusto ante la asamblea
ni caigas en desgracia de la población.
8No te comprometas repitiendo un pecado,
pues ni de uno solo quedarás impune.
9No digas: Dios mirará mis muchas ofrendas,
el Altísimo recibirá mis súplicas.
10No seas impaciente en tu oración
y no regatees tus limosnas;
lino desprecies al hombre atribulado,
recuerda que hay quien levanta y derriba.
12No trames violencias contra tu hermano
ni tampoco contra tu amigo y compañero;
13no te complazcas en mentir,
nada bueno puedes esperar de ello;
14no te metas en la deliberación de los ministros
ni repitas las palabras de tu oración.
15No hagas ascos de las tareas de un servicio,
pues el trabajo lo ha creado Dios.
16No te tengas en más que tus paisanos;
recuerda que la cólera no tarda;
17humilla más y más tu soberbia,
pues al hombre lo esperan los gusanos.
No insistas repitiendo tu súplica,
encomiéndate a Dios y acepta su camino.
18No cambies un amigo por dinero
ni a tu hermano querido por oro de Ofir.
19No repudies a una mujer sensata,
su belleza vale más que corales.
20No maltrates al siervo cumplidor
ni al obrero que se dedica a su oficio.
21Ama al siervo hábil como a ti mismo
y no le niegues la libertad.

Serie positiva

22Si tienes ganado, cuida de él; si te es útil, consérvalo;
23si tienes hijos, edúcalos; cuando aún son jóvenes, búscales mujer;
24si tienes hijas, vigila su cuerpo,
y no seas indulgente con ellas;
25casar una hija es gran tarea,
pero dásela a varón prudente;
26si tienes mujer, no la aborrezcas,
pero no te fíes de una que no te gusta.
27Honra a tu padre de todo corazón
y no olvides los dolores de tu madre;
28recuerda que ellos te engendraron,
¿qué les darás por lo que te dieron?
29Teme a Dios de todo corazón
y venera a sus sacerdotes;
30ama a tu Hacedor con todas tus fuerzas
y no abandones a sus servidores;
31honra a Dios y respeta al sacerdote,
 
y dale su porción como está mandado:
grano escogido, contribución para el culto,
sacrificios rituales, ofrendas consagradas.
32Extiende la mano también al padre,
para que sea completa tu bendición;
33sé generoso con todos los vivos
y a los muertos no les niegues tu piedad;
34no des largas a los que lloran
y guarda luto con los que están de luto;
35no rehúyas al que está enfermo,
y él te querrá.
36En todas tus acciones piensa en el desenlace,
y nunca pecarás.

7,1-3 Sirven de introducción. Con fórmulas breves y felices muestra la dialéctica del mal, sus consecuencias inmanentes, sin apelar a la sanción divina. La imagen agrícola se lee en Os 10-12; Prov 22,8.

7,1 Empieza una amplia serie de consejos negativos que se extiende hasta casi el final del cap. 9, interrumpida por una serie de consejos positivos, 7,21-33. La relación temática de la serie no existe, salvo en algunas unidades menores. Como es costumbre, algunos consejos están ampliados con motivaciones o aclaraciones.

7,4-6 Sobre el poder. "Justicia y prudencia" como méritos aducidos para obtener los cargos: las dos cualidades son necesarias al gobernante: recordar la figura de Salomón y el comienzo del salmo 72, en el cual la justicia es don o encomienda de Dios. La acción represiva es parte integrante del buen gobierno, como muestran Is 11; Sal 101 y otros.

7,4 Prov 25,6-7.

7,7 Se entiende en el gobierno; otra alternativa es: no provoques tu condena, por algún delito. Unido al anterior, "impune" es el contrario de la "condena"; es decir, la asamblea no perdona un delito, cuanto menos la repetición. En otro caso, la impunidad se refiere al castigo divino.

7,9-11 Se plantea la relación entre culto y justicia, bien conocida en la literatura profética: Is 1; 58; Jr 7 etc.; el autor le dedicará un amplio desarrollo en 34,18-35,10. Limosnas y obras de misericordia frente a ofrendas y súplicas. El tercer verso aduce una motivación clásica: Sal 75,8.

7,9 Eclo 34,18-35,10.

7,12-13 Violencia y mentira van con frecuencia juntas, como se aprecia en varios salmos: testigos 27,12; en una serie Sal 55,12; no siempre es violencia física.

7,14b Quizá lo considere falta de confianza: véanse Mt 6,7s; Sant 1,26.

7,15. Alude a Gn 3,23. El "servicio" puede ser del culto (Nm 8,25) o militar (Is 40,2). Como servicio militar podría relacionarse con el título Yhwh Seba'ot, o sea de las milicias estelares. Israel es ejército del Señor: Ex 12, 41.51. Aquí no los opone al estudio del maestro como en el cap. 39.

7,16-17a La soberbia humana provoca la cólera divina: texto clásico Is 2,9-20. Pensando en el desenlace de la muerte, el hombre no puede ponerse por encima de los demás. Los "gusanos": Job 17,14; 25,6.

7,17b Una vez que ha pronunciado la súplica, el hombre debe esperar y aceptar la decisión del Señor. Pero los profetas sabían insistir: Jr 14,11-15,2.

7,18-21 Relaciones con el círculo doméstico: hermano, mujer, siervo. Ben Sira aprecia la belleza de la mujer, especialmente si es sensata: 26,13-18; compárese con la valoración de Prov 31,30. El último consejo sugiere una superación del egoísmo con el amor: sería muy útil retener al siervo hábil, pero más vale su libertad: véase la legislación en Ex 21,1-11; Lv 19,20; 25,39-46; Dt 15,12-18.
7,22-26 Empieza la serie positiva con cuatro cláusulas condicionales referidas también al círculo doméstico. El ganado, por su servicio al hombre: Prov 27,23s. Sobre los hijos diserta Sen Sira en 22,3-6 y 30,1-13; la mujer de la juventud es preferida según Prov 5,15-19. Sobre las hijas, en 26,10 y 42,9-12. Sobre la mujer, supone la legislación de Dt 21,15, que sanciona la poligamia. El punto de vista es puramente masculino, pues los discípulos eran varones.

7,27-28 Faltan en el texto hebreo. La motivación es simplemente humana: gratitud por el don de la vida.

7,29-35 Por la forma, la serie positiva termina en 33a, en 33b retorna la serie negativa. Por el contenido, 29-31 y 32-35 representan las "dos tablas": servicio a Dios en forma de culto y servicio al prójimo en forma de caridad.

7,29-31 Los sacerdotes, dedicados enteramente al culto, han de vivir de su oficio: Dt 12,19; sobre los dones legales véase Nm 15,20s. En paralelo riguroso se encuentran respetar y amar a Dios.

7,32-35 La caridad atrae la bendición completa del Señor: Dt 14,28s. Se extiende a vivos y muertos: con los límites señalados en 38,16-23. De Dt 26,14 deducimos que al muerto se le ofrecían honras fúnebres, no dones. El luto era una ceremonia solemne: cfr. Jr 16,5. El enfermo era considerado a veces herido por Dios, y se temía que contagiase la cólera divina. Los enfermos se quejan de abandono en los salmos: 38,12; Job 19,13-17.

7,36 Conclusión. El desenlace puede ser específico y próximo, el de cada obra o empresa, y final o definitivo. Por la inclusión de este verso con 7,1-3, se refiere al desenlace de cada obra, lo que uno siembra. Colocado al final, se abre a un sentido más amplio. 

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